Ejecuciones extrajudiciales en Colombia habrían seguido, según EE. UU.

Un nuevo reporte sobre la situación de los derechos humanos en el mundo el Departamento de Estado de EE. UU. dice que, si bien se presentaron algunos avances en las investigaciones, las fuerzas de seguridad de Colombia habrían continuado cometiendo ejecuciones extrajudiciales contra civiles.

En su evaluación correspondiente al año 2018, este dependencia le da crédito a oenegés, según las cuales entre enero y agosto del año pasado se presentaron 27 casos de muerte intencional contra civiles que produjeron 34 víctimas. Y pone como ejemplo el caso de Ciro Alfonso Manzano, un campesino que habría sido asesinado por miembros del batallón número 29 del Ejército.

«Una investigación de la Fiscalía en conjunto con el Ejército, determinó que el asesinato no estaba relacionado a una supuesta confrontación», dice el reporte tras mencionar que hay ocho miembros de esta unidad siendo investigados.

El documento también sostiene que entre enero y julio la Fiscalía acusó a 123 miembros de las fuerzas de seguridad por homicidio agravado. Sin embargo, afirmó que, en general, las investigaciones avanzaron con «lentitud», solo se capturó a una sola persona y se lograron condenas en 6 casos de homicidios de personas protegidas y 4 en casos de homicidio agravado.

Según el reporte se presentaron «desarrollos» en los esfuerzos por castigar a aquellos responsables de los llamados «falsos positivos».

Asimismo, durante el año se registraron 246 condenados contra agentes del Estado vinculados con estos y se abrieron 10 nuevos casos. Otros 716 casos estaban pendientes y en etapa de juicio, y más de 2.500 investigaciones permanecen abiertas.

También, citando fuentes de la Fiscalía, Estados Unidos menciona las pesquisas contra 19 generales activos y retirados por su participación en este tipo de asesinatos extrajudiciales.

En el informe, el Departamento de Estado se refiere con dureza al ELN, grupo al que le atribuye la responsabilidad en atentados terroristas, secuestros, homicidio de civiles, desplazamiento forzado, reclutamiento de niños, torturas y otra serie de crímenes. Dice a su vez que tanto el ELN, como otras bandas criminales y narcotraficantes, llevaron la violencia a zonas del país abandonadas por las Farc, en las que estos ahora se disputan el control.

Por último, registran el aumento de los asesinatos de líderes sociales y da crédito a un informe de la ONU de diciembre del año pasado, según el cual han verificado la muerte de 163 personas desde que se firmó el acuerdo de paz. Entre estos, existen más de 450 casos reportados que son materia de investigación.

Sergio Gomez Maseri
Corresponsal de EL TIEMPO en Washington
Twitter: @sergom68

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