‘No podemos dejar que Brasil sea paraíso para turismo gay’: Bolsonaro
Nuevamente el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, desató una polémica al asegurar que su país no debe convertirse en un paraíso para el turismo gay. «Si quieres venir a tener sexo con una mujer, adelante», dijo el mandatario brasileño durante un desayuno con periodistas locales. «Pero no podemos dejar que este lugar sea conocido como un paraíso para el turismo gay. Tenemos familias», agregó.
La lluvia de críticas al presidente no se hizo esperar y las declaraciones fueron rechazadas enfáticamente por la comunidad LGBT de ese país. «Esto no es un jefe de Estado, es una desgracia nacional», dijo David Miranda, congresista de Río de Janeiro, en una entrevista con el periódico británico ‘The Guardian’. «Está manchando la imagen de nuestro país de todas las formas imaginables», agregó Miranda.Por su parte, Jean Wyllys, otro destacado activista LGTBI, comentó que comentarios de este tipo «incitan al odio» contra las minorías.
O que significam as novas ofensas perpetradas por Jair Bolsonaro à comunidade LGBTQ+ brasileira, e o uso que ele fez, mais uma vez, do “kit gay” (mentira que inventou em 2001) para explicar as resistências à sua presença em Nova York. pic.twitter.com/ubNxBTQ64L
— Jean Wyllys (@jeanwyllys_real) 25 de abril de 2019
Días después de que asumió como mandatario, Paulo Teixeira, vicepresidente del Partido de las Trabajadores aseguró: “voy a debatir con el Partido de los Trabajadores la proposición de una medida en el Supremo Tribunal Federal (STF), argumentando la inconstitucionalidad de la Medida Provisorio (MP) por el trato discriminatorio en relación a la población LGBTI”.
De hecho, meses antes de que Bolsonaro asumiera como presidente del país, el número de parejas gais que contrajeron matrimonio aumento considerablemente en el país, por miedo a que Bolsonaro lo prohibiera. Brasil legalizó el matrimonio entre homosexuales en 2013.
Por su parte, activistas y políticos brasileños han denunciado un incremento en la violencia contra la población LGBTI. En la potencia suramericana se registraron en 420 muertes relacionadas con la homofobia y la discriminación sexual en 2018, por lo que esta comunidad pide a las autoridades que dichos delitos sean tratados como crímenes de odio.
A inicios de marzo, en pleno comienzo del famoso carnaval de Río de Janeiro, el presidente Bolsonaro desató una fuerte polémica al compartir en su cuenta de Twitter un video obsceno grabado en la vía pública para criticar los excesos que afirma que se presentan en el carnaval con miembros LGBTI.
“No me siento cómodo mostrando esto, pero tenemos que exponer la verdad para que la población tenga conocimiento y siempre tome sus prioridades. Esto es en lo que se han convertidos muchas fiestas callejeras en el carnaval brasileño. Comenten y dejen sus conclusiones”, dijo el mandatario en su tuit, acompañado de las imágenes explícitas que muestran a un hombre que baila en ropa interior, semidesnudo, sobre el techo de una estación de transporte público. Mientras tanto, otro hombre que está a su lado lo orina la cabeza, al parecer, con su consentimiento.
El presidente brasileño, un excapitán del ejército, es un líder muy polémico cuyos comentarios racistas, homófobos y misóginos han enfurecido a muchos. Llegó a decir que es «homófobo y orgulloso de serlo» y en entrevistas anteriores afirmó que preferiría tener un hijo muerto que un hijo homosexual.
Este tipo de dichos también fueron condenados afuera del país. A principios de abril, el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York canceló un evento para honrar a Bolsonaro. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, respaldó la campaña y calificó al jefe de Estado como «un ser humano muy peligroso».
REDACCIÓN INTERNACIONAL
Con información de agencias