Los países que tienen las armas para iniciar una guerra nuclear
Corea del Norte confirmó este viernes que probó un nuevo tipo de «arma táctica teledirigida», en una operación armada que elevó de nuevo las tensiones regionales y que fue recibida con advertencias de EE. UU. Y es que estos dos países son algunos de los nueve que, de acuerdo con información del Nuclear Weapons Ban Monitor, tienen armas nucleares.
Según datos del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés), los países del mundo nuclearmente armados son: Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte. Todos ellos suman un total 13.865 armas nucleares.
«De estas 13.865 armas nucleares, 3.750 están desplegadas en fuerzas operativas y cerca de 2.000 se mantienen en estado de alta alerta militar«, señala el SIPRI.
Pese a que varios Estados poseen hoy arsenal nuclear, EE. UU y Rusia siguen aún concentrando el 90% del total de las armas.
Lo que preocupa de estas cifras al mundo es la relación tensa que tienen actualmente Moscú y la Otán (La Organización del Tratado del Atlántico Norte), una alianza militar entre EE. UU. y sus aliados.
A inicios y mediados de este mes ambas partes intercambiaron fuertes denuncias y señalamientos.
Rusia insiste en que en los últimos años ha habido un incremento de la actividad de la Alianza Atlántica cerca de sus fronteras, incluido en el mar Negro.
La Otán por su parte protesta por la intervención de Moscú Ucrania, los supuestos espionajes a aliados y los presuntos ataques cibernéticos contra instituciones internacionales.
Vladímir Putin, el presidente de Rusia, ya promulgó una ley que respalda la salida de su país del tratado de desarme nuclear INF, que se firmó en 1987 durante la Guerra fría con EE. UU., y el cual Washington anunció que dejaría de acatar desde el pasado febrero.
La firma del tratado INF puso fin a la crisis de los euromisiles entre los 70 y 80, provocada por el despliegue en Europa de los SS-20 soviéticos con cabezas nucleares y replicada por el emplazamiento de los Pershing estadounidenses.
Ahora, su suspensión hace temer una nueva carrera armamentística entre Moscú y Washington.
En mayo de este año Renata Dwan, directora del directora del Instituto de Investigación de Desarme de Naciones Unidas (UNIDIR), manifestó que el riesgo de que se usen armas nucleares está en su nivel más alto desde la Segunda Guerra Mundial
Dwan expresó preocupación porque todos los Estados que poseen armas atómicas tienen programas de modernización nuclear en marcha y que el panorama sobre el control de este tipo de armamento está cambiando, en parte debido a la competencia estratégica entre China y EE. UU.
Para la experta, los acuerdos tradicionales sobre el control de armas también se están debilitando por el surgimiento de nuevos tipos de guerra, con un predominio cada vez mayor de grupos armados, fuerzas del sector privado y nuevas tecnologías que empañan la barrera entre ataque y defensa.
De estas 13.865 armas nucleares, 3.750 están desplegadas en fuerzas operativas
Uno de los problemas que enfrenta el mundo en relación con las armas nucleares es que la información disponible por cada país no es del todo confiable o completa.
Países como EE. UU. y Reino Unido han brindado «información relevante sobre sus stocks y capacidades nucleares», mientras Francia «ha facilitado también cierta información», asegura el SIPRI.
Sin embargo, «Rusia no hace público el desglose detallado de sus fuerzas contabilizadas y los gobiernos de India y Pakistán facilitan poca información sobre el estado de los arsenales» agrega el SIPRI.
Por su parte, Corea del Norte, si bien ha confirmado que ejecuta pruebas de armas nucleares y de misiles, no comparte información sobre sus verdaderas capacidades nucleares.
Mientras tanto, según el SIPRI, «Israel ha tenido y sigue teniendo una política de no comentar nada sobre su arsenal nuclear».
Rusia no hace público el desglose detallado de sus fuerzas contabilizadas
El lanzamiento de los dos misiles balísticos desde la costa oriental de Corea del Norte hacia el mar se trata de la primera prueba militar que realiza Pionyang tras la histórica cumbre que reunió a su líder, Kim Jong-un, y al presidente estadounidense, Donald Trump, el pasado 30 de junio en la frontera entre las dos Coreas.
Esa operación representa una nueva protesta de Corea del Norte por los ejercicios militares castrenses programados para el mes que viene entre EE. UU. y Corea del Sur, llamados «19-2 Dong Maeng», que tendrán un despliegue menor que en otras ocasiones.
Pero también por la introducción de «armas de ataque ultramodernas» en Corea del Sur, en aparente alusión al despliegue en 2021 de nuevos aviones de ataque estadounidenses comprados por el Gobierno de Seúl.
REDACCIÓN INTERNACIONAL
*Con información de agencias