China pide ayuda ante impacto del coronavirus
El gobierno chino, que comienza a verse desbordado por la epidemia del nuevo coronavirus, pidio ayuda urgente en máscaras, gafas y vestimentas de protección, mientras el saldo de muertos llegó a 361, superando el dramático saldo del SRAS en 2003.
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La portavoz adjunta del ministerio de Asuntos Exteriores, Hua Chunying declaró que varios países, entre ellos Francia, Reino Unido, Japón y Corea del Sur, ya enviaron material médico a China.
La necesidad urgente de mascarillas de protección se debe a que, según el ministerio de Industria, tras concluir las vacaciones del Año Nuevo Lunar, las plantas retoman lentamente su capacidad de producción y operan en este momento en un 60 o 70 por ciento de su capacidad. Cuando funcionan a pleno rendimiento, las fábricas chinas producen alrededor de 20 millones de mascarillas por día.
Además, el uso de estos elementos se volvió obligatorio en la provincia Guangdong, la más poblada de China, con más de 110 millones de habitantes, así como también en Sichuan, Jiangxi, Liaoning y en la ciudad de Nankin, por lo que más de 300 millones de personas deben salir con la cara cubierta, haciendo evidente la escasez en los equipos de protección.
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El día con más decesos reportados
Las autoridades sanitarias chinas reportaron 57 decesos en las últimas 24 horas, en el peor saldo diario desde que el coronavirus fue detectado en diciembre en Wuhan, la capital de la provincia de Hubei.
En China continental (sin contar a Hong Kong y Macao) ya hay más muertos que los 349 que provocó la epidemia de Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) en 2002-2003. El SRAS, que contagió a unas 5.300 personas en varios países, dejó un balance total de 774 muertos, en su mayoría en Hong Kong.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), que ya declaró emergencia internacional por la actual epidemia, reportó en Filipinas la primera víctima mortal del coronavirus fuera de China, un hombre de 44 años de Wuhan.
Las autoridades chinas reportaron 57 decesos en las últimas 24 horas, el peor saldo diario desde el inicio del virus
Ciudadanos de Wuhan, víctimas del estigma
Los habitantes de la ciudad de Wuhan, epicentro del coronavirus y el lugar donde se concentran el mayor número de contagios y de muertes, son perseguidos en el resto de China como «criminales», pues son objeto de delaciones pagadas e interrogatorios cerrados.
Sus habitantes se sienten discriminados y bajo constante sospecha. Lucy Huang, una directora de documentales de 26 años que vive en Pekín y nació en Wuhan, dice sentirse «muy herida». «Nuestro enemigo es el virus, no debería ser la población de Hubei o Wuhan», afirmó la mujer.
Al concluir las vacaciones del Año Nuevo lunar aumentaron las preocupaciones de una mayor propagación del virus, ya que muchos habitantes que viajaron regresan a sus hogares. Algunos barrios de Pekín están atrincherados, a veces detrás de barreras improvisadas, para contener a los visitantes o las personas que regresan para proporcionar el historial de su viaje.
Los cerca de 56 millones de habitantes de la región de Hubei están aislados del mundo desde el 23 de enero, y tienen severas restricciones para salir de sus viviendas, en una tentativa de contener la propagación.
A estas limitaciones, se suman las presiones de los gobiernos locales para expulsar a los ciudadanos de Hubei y las excesivas medidas que continúan tomando los habitantes de los barrios ante el temor de contagiarse.
Los ciudadanos procedentes de Hubei reciben llamadas telefónicas diarias y deben controlar su temperatura durante dos semanas. Si los habitantes «no confían en la persona de al lado, deben llamar inmediatamente» al comité de barrio.
En un barrio de Shijiazhuang, una ciudad situada al suroeste de Pekín, ofrecen unos 2.000 yuanes (260 euros, 288 dólares) por denunciar a personas que fueron en las últimas dos semanas a Wuhan, capital de Hubei.
Ofrecen unos 2.000 yuanes (288 dólares) por denunciar a personas que fueron a Wuhan
El impacto económico
El coronavirus también tiene un impacto económico cada vez más fuerte, por el cierre de negocios en China, la suspensión de viajes internacionales y el impacto en las líneas de producción.
Los mercados bursátiles en Shanghái y Shenzhen cayeron estrepitosamente un 8 por ciento cuando los inversores regresaron de las vacaciones extendidas por el Año Nuevo Lunar.
Las empresas de cruceros decidieron prohibir la presencia en sus navíos de pasajeros o miembros de la tripulación que viajaron a China en los últimos 14 días, anunció la Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA), con sede en Hamburgo.
Más medidas
Varios países han multiplicado las medidas de protección y repatriado a sus ciudadanos desde China. Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Israel, Guatemala y El Salvador, entre otros, prohibieron la visita de extranjeros si han estado en
China recientemente, y también han advertido a sus propios ciudadanos evitar viajes a territorio chino.
China criticó duramente el lunes a Estados Unidos por haber iniciado las restricciones y acusó a Washington de «crear y sembrar el pánico». «No nos ha dado por ahora ninguna ayuda sustancial», dijo la portavoz de la cancillería.
Rusia anunció este lunes que expulsará a los extranjeros contagiados con el nuevo coronavirus. Mongolia, Rusia y Nepal cerraron sus fronteras terrestres.
Los países del G7 -Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos- ya tienen casos de contagio. Los siete países discutirán una respuesta conjunta. El gobierno británico además anunció que aportará ayuda financiera para el desarrollo de una vacuna.
AFP