¿Se le enreda el camino a Trump hacia la reelección en Estados Unidos?

Para las elecciones presidenciales en Estados Unidos faltan poco más de 14 meses, y cualquier cosa puede pasar.

Sin embargo, el camino a la reelección del presidente Donald Trump no se ve nada fácil. Al menos eso es lo que sugieren las más recientes encuestas.

Una de ellas, realizada por la compañía Morning Consult, se puso a la tarea de medir los niveles de popularidad de Trump en un grupo de 15 estados que son considerados claves para ganar estos comicios en EE. UU.

Y en todos el veredicto fue el mismo: sus índices de aprobación netos (el resultado de la suma de su aprobación menos su desaprobación) vienen en caída libre desde que asumió la Casa Blanca en enero del 2017.

Sus índices de aprobación vienen en caída libre desde que asumió la Casa Blanca en enero del 2017.

Dado que en EE. UU. la mayoría de estados se inclinan claramente hacia uno de los dos partidos tradicionales, la pelea electoral normalmente se libra en estos 15 estados a los que se les llama ‘oscilantes’ (battleground states).

Y si bien han ido cambiando a lo largo de la historia, desde al menos una década vienen siendo más o menos los mismos.

Los más importantes por su peso en el Colegio Electoral –en EE. UU. no gana el que obtenga más votos a nivel nacional, sino más asientos en el Colegio Electoral– son Florida, Ohio, Pensilvania y Míchigan. Pero a ese grupo de oscilantes también se suman Nuevo Hampshire, Wisconsin, Minnesota, Maine, Nuevo México, Colorado, Nevada, Iowa, Arizona, Virginia y Carolina del Norte.

De acuerdo con la encuesta, la aprobación de Trump en todos ellos es en este momento negativa.

Incluso en aquellos que ganó en los comicios del 2016 (ocho de estos quince estados). En la Florida, por ejemplo, su aprobación neta pasó de 22 a 1 negativo; en Carolina del Norte, de 17 a 1 negativo; en Ohio, de 14 a 6 negativo; en Arizona, de 19 a 7 negativo; en Iowa, de 9 a 11 negativo; en Pensilvania, de 10 a 8 negativo; en Wisconsin, de 6 a 14 negativo, y en Míchigan, de 7 a 11 negativo.

En los otros siete oscilantes donde perdió por un estrecho margen en 2016, la situación es aún peor: en Nuevo Hampshire pasó de 1 a 17 negativo; en Minnesota, de 3 a 14 negativo; en Maine, de 8 a 13 negativo; en Nuevo México, de 17 a 13 negativo; en Colorado, de 1 a 12 negativo; en Nevada, de 10 a 11 negativo, y en Virginia, de 8 a 4 negativo.

Lo más grave para el presidente son los resultados parciales en Míchigan, Pensilvania y Wisconsin, pues fueron estos tres estados que llevaban varios ciclos electorales votando por candidatos demócratas los que finalmente le dieron las llaves de la Casa Blanca, y tan solo por un puñado de votos.

En otras palabras, si Trump pierde en ellos en las elecciones del 2020, probablemente, no le alcanzarían los votos para hacerse reelegir así gane en todos los otros estados donde triunfó en el 2016.

Bill Clinton, expresidente de Estados Unidos

El expresidente Bill Clinton ganó en Georgia en 1992, un estado que desde 1972 vota republicano.

Foto:

Saul Loeb / AFP

Los números, incluso, también lucen regulares en estados que por lo general apoyan a candidatos republicanos. En Georgia, que lleva votando por este partido desde 1972 (con excepciones en las elecciones de 1976, cuando se inclinó por Jimmy Carter, y en 1992, por Bill Clinton), Trump vio su aprobación caer 16 puntos (de 18 a 2).

Y en Texas, donde no gana un demócrata hace casi cuatro décadas, cayó 15 puntos (de 21 a 6). Esos datos han hecho pensar a muchos demócratas en la hasta ahora remota posibilidad de “voltear” a alguno de estos dos estados en los próximos comicios.

A este sondeo se suma otra encuesta que publicó el miércoles la Universidad de Quinnipiac, según la cual Trump perdería con cualquiera de los cinco candidatos que hoy encabezan la puja por la nominación del Partido Demócrata.

Joe Biden exvicepresidente de EE. UU.

El exvicepresidente Joe Biden le ganaría a Trump, según todas las encuestas.

Foto:

Mike Segar / Reuters

Y todos por paliza. El exvicepresidente Joe Biden, por ejemplo, le ganaría con un 54 por ciento del voto frente a un 38 por ciento del actual mandatario. El Senador Bernie Sanders haría lo propio (53 contra 39), al igual que la senadora Elizabeth Warren (52 contra 40); la senadora Kamala Harris (51 contra 40) y el alcalde de South Bends (Indiana), Pete Buttigieg (49 contra 40).

“En los mano a mano hipotéticos entre el presidente Trump y los cinco que lideran la batalla por la candidatura demócrata, el número clave parece ser 40. No importa contra cuál se enfrente, nunca supera el 40 por ciento. Algo, entre otras, que es muy cercano a sus índices de aprobación nacional”, afirma Mary Snow, una de las analistas de la Universidad de Quinnipiac, que adelantó el sondeo.

En los mano a mano hipotéticos entre Trump y los cinco que lideran la batalla por la candidatura demócrata, el número clave parece ser 40. No importa contra cuál se enfrente, nunca supera el 40 %

En los dos años y medio que lleva en la Oficina Oval, Trump, de hecho, nunca ha logrado sobrepasar el 46 por ciento de aprobación y su promedio se ubica en 42,8 por ciento de acuerdo con Real Clear Politics.

La encuesta de Quinnipiac, además, coincide con otros sondeos que se publicaron a lo largo del verano, entre ellos uno que se filtró de la propia campaña de Trump en el que aparecía perdiendo frente a potenciales rivales demócratas en la mayoría de los estados oscilantes.

Tanto el presidente como oficiales en su campaña han desestimado esta serie de muestras y recuerdan el fracaso de la mayoría de las firmas encuestadoras que lo dieron como perdedor en las elecciones del 2016.

SERGIO GÓMEZ MASERI
Corresponsal de EL TIEMPO
Washington
Twitter: @sergom68

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *