Cómo afectarán incendios en Amazonia a Evo Morales y a Jair Bolsonaro
Los incendios en la Amazonia brasileña y la Chiquitania boliviana pueden dejar más que una gigantesca huella en el paisaje de los dos países, pues los gobiernos de Jair Bolsonaro y Evo Morales se enfrentan a duras críticas, lo que podría reconfigurar el mapa político en esos países.
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Aunque como dirigente indígena y luego como candidato, el presidente boliviano, Evo Morales, se presentó como un adalid del medio ambiente, su situación actual es totalmente diferente, pues los incendios, que han devorado más 1,2 millones de hectáreas de la Chiquitania, ubicada entre el Gran Chaco y la Amazonia, pueden convertirse en un punto negativo contra su deseo de ejercer el cuarto mandato consecutivo.
Al igual que sucede con Bolsonaro en Brasil, al presidente boliviano lo han criticado por actuar tarde frente a los incendios. En eso tiene que ver el hecho de que Morales ha autorizado un mayor número y más grandes quemas voluntarias para ampliar la frontera agrícola, práctica que beneficia a los empresarios ganaderos o agroindustriales de la soya y la caña, que están viendo sus frutos pues recientemente comenzaron a exportar a China.
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Pero no es solo eso lo que ha causado malestar, pues el miércoles pasado Morales viajó en helicóptero a una de las zonas afectadas, vestido con un overol azul e indumentaria de bombero y ayudó a sofocar un punto de fuego.
En este caso hubo videos y fotos del mandatario ayudando a los bomberos y la oficina de prensa de la Presidencia distribuyó el material a todos los medios de comunicación y en las redes sociales del Palacio Quemado (sede de la Presidencia) hubo amplio despliegue del hecho.
Los defensores del presidente dijeron que ese gesto mostró el compromiso de Morales con la tragedia natural que se presenta en la zona de la Chiquitania.
Sin embargo, sus opositores vieron en esa expresión la instrumentalización de la catástrofe ambiental con fines electorales, pues la primera vuelta presidencial se realizará el 20 de octubre y el mandatario necesita subir puntos en las encuestas.
El expresidente y candidato opositor Carlos Mesa escribió en Twitter que “ojalá” que los “shows mediáticos” de Morales “valieran para salvar todo lo que Bolivia ha perdido en la mayor catástrofe ecológica de la Chiquitania”.
Otros dijeron que era una “vergüenza que en una desgracia quieran aprovecharse y hacer política de ello”.
Hemos reforzado nuestra capacidad operativa contra el incendio en la Chiquitania con más de 7.000 personas. Contaremos con 20 aeronaves, entre ellas el Supertanker, el Ilyushin Il-79 y el Helitanker; los tres con capacidad para cargar 137.000 litros. #UnidadEnLaAdversidad pic.twitter.com/QpyZHpeKMH
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 31, 2019
El analista senior para América Latina del Real Instituto Elcano de España, Carlos Malamud, le dijo a EL TIEMPO que Morales ha “insistido en el tema de la soberanía y el nacionalismo para condicionar la ayuda extranjera para la tragedia” y condicionó la “gestión estatal ante los incendios al valor de la factura en las elecciones presidenciales”. “Si se le critica” (como está sucediendo en los últimos días) le puede pasar factura” dijo el analista y enfatizó en que “si la división de la oposición continúa, la reelección de Morales será un hecho”.
Hay otros dos elementos que podrían afectar a Morales en su camino a la reelección.
El primero es que muchos en Bolivia consideran que el intento de reelección del presidente es ilegitimo, porque había sido rechazado por la ciudadanía en un referendo en 2016 (aunque autorizado después por el tribunal constitucional).
El ‘Trump’ suramericano, en líos
En Brasil el presidente Jair Bolsonaro, quien desde que era candidato menospreció el los efectos del cambio climático, ha visto cómo los incendios en la Amazonia se multiplican (90.000 hasta el domingo pasado).
Su gobierno no acepta el cambio climático, pero todas las ONG medioambientales dicen que sus políticas de promoción de la agricultura y la ganadería son las causantes de las miles de quemas de las que muchas se salieron de control y han afectado cientos de miles de hectáreas del ‘pulmón del mundo’.
Bolsonaro se muestra a favor de reducir la fiscalización medioambiental en las áreas protegidas, de impulsar la explotación en la Amazonia y legalizar la minería en las reservas indígenas, lo que le ha valido críticas de organizaciones civiles que trabajan por mantener los recursos naturales.
Esa retórica y el aumento de los incendios en la Amazonia llevaron al presidente de Francia, Emmanuel Macron, a retirar su apoyo al acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) al considerar que el presidente brasileño «mintió» en relación a su compromiso con el cuidado del medioambiente.
Los gobiernos de Alemania y Noruega, que han financiado la protección de la selva amazónica, también congelaron los recursos y Bolsonaro los ha criticado con palabras desobligantes.
El mandatario brasileño al comienzo minimizó la crisis y luego señaló a las ONG como posibles responsables de los fuegos. El mandatario sólo reaccionó tras recibir críticas internacionales y alertas de preocupación en el comercio sobre la suspensión de ventas en retaliación a la imagen ambiental de Brasil.
En este sentido, el principal exportador de carne del mundo que necesita cada vez más áreas para que paste el ganado, podría verse afectado, aunque las decisiones en materia de comercio exterior las toma el sector privado.
Para Malamud, la tragedia ambiental brasileña “puede tener muy malas repercusiones dentro del país y también para los vecinos”. Además, dice, “el sesgo profundamente reaccionario de la administración de Bolsonaro y su aproximación a la administración de Donald Trump le hace perder simpatías entre varios países”.
Precisamente el lunes se conoció la más reciente encuesta del instituto Datafolha en la que el índice de desaprobación al mandatario subió 5 puntos porcentuales en un mes del 33 por ciento en julio hasta el 38 por ciento en agosto, mientras que la aprobación del líder de la ultraderecha brasileña cayó del 33 por ciento al 29 por ciento en un mes.
En este aspecto, tanto los incendios en la Amazonia y una serie de polémicas protagonizadas por el capitán en la reserva del Ejército han ocasionado el aumento de su impopularidad.
Vergüenza que en una desgracia quieran aprovecharse y hacer política de ello
Boaventura de Souza Santos, profesor brasileño de las universidades de Coimbra y Wisconsin le dijo a EL TIEMPO que no hay coherencia en el discurso de Bolsonaro pues con los incendios «viene con una respuesta arrogantemente nacionalista que no tiene credibilidad, pues es él quien ha entregado los recursos más estratégicos a Estados Unidos como el petróleo, la base de Alcántara y el acceso a la Amazonia. Es una defensa poca creible».
El analista considera que en Brasil «todavía hay un 30 por ciento de población que apoya al mandatario, pero el descontento con él crece y a nivel internacional no tiene credibilidad e incluso en el país algunos hablan de que podrían buscar hacerle un juicio político para sustituirlo».
Holman Rodríguez Martínez
Redacción Internacional
En Twitter @holmanrodriguez